El Gobierno de la Generalitat ha anunciado este miércoles, en el marco de la cumbre del cambio climático de Naciones Unidas (COP29) que tiene lugar en Bakú, en Azerbaiyán, que trabaja en una nueva línea de préstamos bonificados para que las empresas impulsen proyectos de adaptación y mitigación del cambio climático. El Departamento de Territorio y el ICF están ultimando una financiación específica que combinará la bonificación del tipo de interés con recursos provenientes del Fondo Climático, que gestiona el Departamento de Territorio, Vivienda y Transición Ecológica, con la financiación del ICF. De esta forma, las empresas que quieran impulsar proyectos de descarbonización o adaptación a los efectos del cambio climático tendrán préstamos con mejores condiciones.

Esta línea complementará la actual oferta de préstamos para inversiones sostenibles que el ICF ofrece al tejido económico. La sostenibilidad y la descarbonización forman parte de la estrategia de la banca pública de promoción, que actualmente cuenta ya con diversos productos enfocados a las finanzas sostenibles. La colaboración entre el Departamento de Territorio y el ICF servirá para incentivar que las empresas pongan en marcha proyectos de adaptación o mitigación del cambio climático.

Bonificación con la tasa de carbono

La medida, que se hará efectiva en los próximos meses, ha sido avanzada por la directora general de Cambio Climático y Calidad Ambiental, Sonsoles Letang, durante un acto paralelo de la COP29 sobre el liderazgo de los estados y las regiones en proceso de desarrollo en materia de financiación climática, que es el tema central de la cumbre a nivel global. La directora ha explicado que «esta es una propuesta innovadora de financiación con la que varios sectores están muy esperanzados y que seguro que en breve replicarán otras regiones, porque incrementa la competitividad empresarial».

Los proyectos que se financiarán serán, a todos los efectos, los que internalicen sus costes ambientales, desincentiven modelos no sostenibles y sean coherentes con las líneas estratégicas de Acción por el clima (ODS13) y los fondos Next Generation impulsados ​​por la Unión Europea.

Menos vulnerabilidad

Algunos de los ámbitos de actuación previstos son el fomento de las energías renovables y de la eficiencia energética, la descentralización de redes y el autoconsumo energético, la movilidad sostenible, la eficiencia y el ahorro de agua, la conservación y la lucha contra la pérdida de biodiversidad, la garantía de protección de la población frente al incremento del riesgo de fenómenos meteorológicos extremos, la adaptación y la reducción de la vulnerabilidad de los sectores económicos y de los sistemas naturales, la modificación de los procesos de producción para reducir las emisiones contaminantes y la transformación del modelo agroindustrial en un nuevo modelo que garantice la soberanía alimentaria.

Estos nuevos préstamos estarán alineados con la Estrategia catalana de adaptación al cambio climático, horizonte 2030 (ESCACC30), que establece varios objetivos operativos y medidas en el ámbito financiero, entre otros, para reducir la vulnerabilidad del sector a los impactos del cambio climático.